El estrés es una de las palabras más mencionadas tanto en el campo de la salud mental, como en diversos ámbitos y disciplinas de la vida. Veamos que es el estrés, de que trata y 3 técnicas que pueden ayudar a aliviarlo.
El estrés es una respuesta de nuestro organismo, principalmente de nuestro sistema nervioso frente a una determinada amenaza o situación que no sabemos cómo manejarla de manera correcta. Básicamente nuestro cuerpo se prepara para poder protegernos y formar una barrera para que el cuerpo se “defienda” o aguante una situación de emergencia. El estrés viene acompañado de muchos síntomas que se manifiestan a nivel físico, cognitivo, emocional y a veces hasta conductuales en los cuales se puede observar una especie de cambios en algunos aspectos de la forma de ser del individuo.
Como dijimos recientemente, el estrés está formado por un enorme conjunto de síntomas correspondientes a diversas áreas del organismo y del funcionamiento cognitivo. A continuación mencionaremos estos síntomas en sus categorías correspondientes.
Síntomas físicos: dolor en el pecho, mareos, náuseas, taquicardia, pérdida de libido.
Síntomas emocionales: alteración, problemas para relajarse, infelicidad, aislamiento, mal humor, abrumación.
Síntomas conductuales: procrastinar, dormir en exceso, problemas con la alimentación (comer mucho o poco dependiendo de la persona), hábitos como el consumir tabaco, alcohol o calmantes en exceso.
Síntomas cognitivos: pensamientos recurrentes, pesimismo, preocupación constante, rigidez en los pensamientos, falta de atención y foco.
En este apartado te vamos a designar tres maneras muy simples para aliviar el estrés y bajar los altos niveles de estrés que tanto afectan nuestra vida. Una de ellas es algo bastante común y quizás ni te lo esperes. Vamos con las tres técnicas.
El acto de respirar es automático e inconsciente. Poder reconectar conscientemente con tu respiración te puede devolver a un estado de calma en cuestión de pocos minutos. La respiración es la vuelta al cuerpo, a lo que está pasando en el presente. Esto permite que todo tu sistema comience a descontracturarse y volver a un estado de calma. Practicar esto en cualquier momento es beneficioso para aliviar el estrés y recuperar un estado de confianza y seguridad.
Comprender de dónde viene tu respuesta o dónde está el verdadero estresor, puede desenmascarar gran parte del fantasma. Recuerda que siempre van a haber obstáculos o situaciones de tensión en la vida. Pero no por eso deberían interferir en tu salud. Poder comprender y observar qué es lo que sucede, qué te tiene tan mal, siempre será beneficioso. Un profesional de la salud, cómo un terapeuta, podría ayudarte en este punto.
Es muy sabido que la música tiene un efecto muy positivo en el cuerpo y en los estados mentales. Los sonidos tienen un efecto liberador en el individuo, por eso mismo escucha la música que te haga sentirte mejor. Sea el género que sea, si bien las sinfonías son las más populares a la hora de hablar de relajación, todos los géneros sirven, sea country, rock, rap, reggae o el que sea de tu preferencia. También la música hace que nos movamos y el movimiento físico también nos ayuda a bajar el estrés.
No existe una persona que jamás se haya estresado por algo. No necesariamente nos estresamos por las mismas circunstancias, lo cual es lógico porque somos todos distintos. Pero dado que el estrés es una respuesta de huída de nuestro organismo de algo que nos da miedo y que es amenazante, es lógico y hasta natural que nos estresemos. Así que quédate tranquilo que si te sientes estresado, no te olvides que hay mucha gente como vos y que es una respuesta común del organismo.
Reflexión
Pudimos ver que el estrés es una respuesta normal del organismo frente a lo desconocido, que contiene una variedad de síntomas correspondientes a diferentes áreas y funciones del organismo y que es manejable. Para esta ocasión quisimos ayudarte con tres técnicas simples, económicas y fáciles de aplicar, aunque la realidad es que hay muchas técnicas para afrontar el estrés.
Quédate tranquilo que es común vivir o tener estrés en algún ámbito o época de nuestra vida. En caso de que tu nivel de estrés sea muy intenso, que esté afectando tú día a día y tú funcionamiento persona, o que sientas que no lo puedes manejar, te recomendamos que averigües con un profesional de la salud mental ya sea un psicólogo o asesor psicológico para que te ayuda a enfrentar tus problemas de estrés.